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Anderson Posada Ministerio Adorando en Su Presencia

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Matrimonio

El mejor consejo matrimonial de todos los tiempos...✍🏾

1. Elijan amarse el uno al otro, incluso en esos momentos en los que les cuesta agradarse. El amor es un compromiso, no un sentimiento.

2. Conteste siempre el teléfono cuando su esposo/esposa llame o escriba. Cuando sea posible, trate de mantener el teléfono apagado cuando esté junto con su cónyuge.

3. Hagan del tiempo juntos una prioridad. Presupuesto para una cita nocturna constante. El tiempo es la "moneda de las relaciones", así que invierta tiempo constantemente en su matrimonio.

4. Rodéate de amigos que fortalecerán tu matrimonio. Aléjate de las personas que puedan tentarte a comprometer tu carácter.

5. Haz de la risa la banda sonora de tu matrimonio. Comparte momentos de alegría. E incluso en los momentos difíciles, encuentre motivos para reír.

6. En cada discusión, recuerde que no habrá un "ganador" y un "perdedor". Son socios en todo, por lo que ganarán o perderán juntos. Trabajen juntos para encontrar una solución.

7. Date cuenta de que un matrimonio fuerte rara vez tiene dos personas fuertes al mismo tiempo. Por lo general, se trata de marido y mujer que se turnan para ser fuertes el uno por el otro en los momentos en que el otro se siente débil.

8. Prioriza lo que sucede en el dormitorio. Se necesita más que s3x0 para construir un matrimonio fuerte, pero es casi imposible construir un matrimonio fuerte sin él.

9. Recuerde que el matrimonio no es 50/50: el divorcio es 50/50. El matrimonio tiene que ser 100/100. No se trata de dividir todo por la mitad, sino que ambos socios dan todo lo que tienen.

10. Den lo mejor de ustedes el uno a otro, no lo que les sobra después de haber dado lo mejor de sí a todos los demás.

11. Aprenda de otras personas, pero no sienta la necesidad de comparar su vida o su matrimonio con el de nadie más. El plan de Dios para tu vida es magistralmente único.

12. No dejes tu matrimonio en espera mientras crías a tus hijos o terminarás con un nido vacío y un matrimonio vacío.

13. Nunca se guarden secretos el uno al otro. El secreto es enemigo de la intimidad.

14. Nunca se mienta el uno al otro. Las mentiras rompen la confianza y la confianza es la base de un matrimonio fuerte.

15. Cuando hayas cometido un error, admítelo y busca humildemente el perdón. Deberías decir rápidamente: "Me equivoqué. Lo siento. Por favor, perdóname".

16. Cuando tu marido/esposa rompa tu confianza, si es posible bríndale tu perdón al instante. Esto promoverá la curación y creará la oportunidad de reconstruir la confianza. Debes decir rápidamente: "Te amo. Te perdono. Sigamos adelante".

17. Sean pacientes unos con otros. Tu cónyuge siempre es más importante que tu horario.

18. Modele el tipo de matrimonio que hará que sus hijos quieran llegar a ser buenos maridos y sus hijas quieran llegar a ser buenas esposas.

19. Sea el mayor alentador de su cónyuge, no su mayor crítico. Sé tú quien enjuga sus lágrimas, no quien las provoca.

20. Nunca hables mal de tu cónyuge con otras personas ni te desahogues en línea. Protege a tu cónyuge en todo momento y en todo lugar.

21. Usa siempre tu anillo de bodas. Te recordará que siempre estás conectado con tu cónyuge y le recordará al resto del mundo que estás fuera de tus límites.

22. Cuando tengas que elegir entre no decir nada o decirle algo malo a tu cónyuge, no digas nada cada vez.

23. Nunca consideres el divorcio como una opción. Recuerde que un "matrimonio perfecto" son sólo dos personas imperfectas que se niegan a darse por vencidos el uno al otro.

Antonio Caicedo

LEE ¿CÓMO LA MUJER NECIA DESTRUYE LA CASA?



Las crisis y los problemas en el matrimonio no siempre son culpa exclusiva del hombre, también hay mujeres que no cuidan, no valoran, no respetan y que también traicionan, igual hay muchas que ellas mismas crean un ambiente hostil, insoportable y donde todo se convierte en un campo de guerra.

Por lo tanto así como hemos compartido la reflexión "Cómo el Hombre Insensato Destruye su Familia". Ahora esta va dirigida a esas mujeres que en verdad existen y que también destruyen poco a poco con sus propias manos su matrimonio y su familia.

Y ¿Cómo lo hacen?

–CON SUS PALABRAS.

Cuando una mujer solo tiene palabras negativas, destructivas para su esposo, incluso para sus hijos, y vive comparando a su esposo con otros hombres y le pasa cortando sus alas, le desanima, le critica y siempre lo pone en mal, cuando con sus palabras su astucia y su capacidad de influencia quiere ejercer dominio para que su esposo haga las cosas que ella quiere, a la manera de ella y como ella las dicta.

–CON SUS DESPLANTES.

Cuando una mujer no agradece y no valora lo que financieramente está al alcance de su esposo, lo crítica lo pone en mal, le vive sacando que estaba mejor antes de casarse con él, desprecia lo que quizá con sacrificio le puede dar y que puede aportar a la casa y a pesar de su esfuerzo ella no aprende a contentarse, sino que vive para señalar sus errores, para quejarse y hacer pleito por todo y por nada y le demuestra con su actitud que haga lo que haga nada es suficiente, lo trata mal, en toda discusión le grita y nunca pone de su parte para arreglar las cosas.

–CON SU POCO AFECTO.

Cuando una mujer tiene mucha más empatía con su mamá, con su papá, hermanos, primos y familiares o amistades de ella, les cuida y les atiende con gran entusiasmo, se preocupa más y está siempre para ellos para abrazarles, se esfuerza por tenerles contentos y agradarles; pero a su esposo no le muestra ningún acto de servicio, no le abraza, no le honra y no le atiende, porque le ve con desprecio, si su esposo la busca, lo rechaza una y otra vez y usa el sexo como un método de chantaje a su conveniencia.

–CON SUS GRIETAS.

También hay mujeres explosivas, con mal carácter, con celos impulsivos y enfermizos y deseo incontrolable de posesión y manipulación con su esposo, mujeres que gastan el dinero en cosas innecesarias y en vez de ayudarle financieramente a progresar a su esposo, lo hunden en deudas sin sentido queriendo vivir de apariencias, no permiten que nadie les diga nada, gritan, insultan, maltratan y denigran y lastiman a su esposo, actuando por impulso y sin poder controlar la emoción del momento, le pasan factura por situaciones de su pasado; es decir, por faltas graves de una relación tóxica previa o por eventos traumáticos, heridas abiertas, donde no tiene nada que ver su esposo o tal vez cicatrices que dañaron mucho su corazón.

–CON SU ORGULLO Y EGOÍSMO.

Aunque algunas mujeres tal vez no lo crean, porque es más común en los hombres, lo cierto es que, también hay mujeres orgullosas y egoístas, que no reconocen nunca que también pueden tener errores y fallas, que solo exigen y destacan que quien debe de cambiar es su esposo y ellas a criterio de ellas mismas piensan que están más que bien, y no tienen nada que necesiten cambiar, solo ellas quieren recibir atención y cuidado y que le llenen sus necesidades, pero ellas no están dispuestas a sacrificar, luchar, esforzarse y trabajar a sí mismo por el bienestar de su matrimonio, mujeres que le prohíben a su esposo visitar a sus padres o que les ayude con dinero, son de las que aun sabiendo que su esposo tenía hijos, antes de conocerla a ella, le prohíbe que los vea o que cumpla su responsabilidad como padre con ellos.

Un matrimonio estable necesita un hombre sabio que aprenda a amar, respetar y cuidar a su esposa; pero también es igual de importante que la mujer sea sabia, ayuda idónea que esté dispuesta a asumir con la mejor actitud que puede mejorar como esposa y que constantemente busque ayudar y apoyar a su esposo, que llene la casa de palabras de afirmación, que crea en él, que disfrute y celebre sus logros aunque sean pequeños, que tenga el consejo oportuno bajo la manga, que cuide la cartera de su esposo y que siempre se acomode a su presupuesto, que ore más por él y lo critique menos y que de manera regular le diga: "Tú eres el mejor hombre con el que Dios me pudo bendecir" y si considera que no se merece esas palabras, entonces... ¿Por qué se casó con él?

Entendamos, un matrimonio es de dos y hay casos en los que no siempre el culpable de que todas las cosas estén mal, es el hombre, hay casos donde la mujer es responsable de que no funcione el matrimonio, lo hemos dicho antes los dos tienen que trabajar, los dos deben de cambiar y esforzarse por ser mejor cónyuge para su pareja, somos una página integral, pero está publicación está dirigida a la mujer que quiera ser más sabia y evitar estas fallas, que desea cambiar y ser esa ayuda idónea, mujer virtuosa y sabia que edifique su casa y que de su parte cree un ambiente de amor.

Por último reiteramos:

El matrimonio necesita de dos personas comprometidas con Dios y comprometidas el uno con el otro en un pacto de amor, respeto y lealtad mutuo.
A veces la mujer ha sido muy sabia con un hombre necio, insensato y que de su parte solo ha destruido, ha herido y traicionado a su esposa y en consecuencia tiene una mujer que hace todo lo antes mencionado.

Pero para otros casos donde a usted como mujer le hace falta ser más sabia, si algo le puede servir en su matrimonio a usted como esposa, tome únicamente lo bueno, lo que pueda aplicar en su relación y deseche lo que no aplica en ninguna medida para usted.

Créditos RRSS

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¿CÓMO EL HOMBRE INSENSATO DESTRUYE SU FAMILIA?



-CUANDO EDIFICA SU CASA SOBRE LA ARENA Y NO SOBRE LA ROCA.
(Mateo 7:24-27)

Cada quien toma sus decisiones a la manera que cree es la manera correcta, pero una de las razones por las cuales un hogar se puede destruir es por no estar fundamentado sobre la roca que es Cristo, cuando un hombre le da prioridad a todo menos para orar y bendecir su esposa e hijos, ser él influencia para llevarles a la iglesia como el hombre cabeza de hogar y no siembra principios y valores en su hogar y mucho menos los vive o los práctica, deja la puerta abierta e insegura y cualquier viento podrá derribar esa casa por no tener cimientos fuertes que solo se logran cuando permitimos que Dios sea el arquitecto en jefe de nuestra casa.

-CUANDO ES GOBERNADO POR VICIOS O ADICCIONES.
(Gálatas 5:19-21)

Cuando un hombre ya casado y con hijos no lucha y no hace nada por abandonar los vicios de su juventud, ser libre de todos los deseos de la carne y estos lo controlan, lo manipulan y se vuelve incapaz de renunciar a todos los vicios como drogas, alcohol, pornografía, amistades que solo le llevan a perdición, apuestas, futbol, videojuegos y vanidad en exceso, gasta e invierte de manera desmedida y sin control en tales vicios hasta afectar las finanzas del hogar más temprano que tarde saciar todos esos deseos afectará su matrimonio.

-CUANDO NO TIENE DOMINIO PROPIO Y LO GOBIERNA EL MAL CARÁCTER.
(Proverbios 22:24-25)

Un hombre con mal carácter, explosivo, que se enoja con facilidad, que no permite corrección o consejos de nadie, un hombre que siempre hace culpable a su mujer de todos sus problemas matrimoniales y a todos los demás menos él, ese hombre que nunca asume sus errores y no hace algo para cambiar, un hombre manipulador, orgulloso, soberbio, egoísta, con celos compulsivos que siempre piensa en él antes que en su esposa o sus hijos, que nunca pide perdón, un hombre con tantas grietas y que no hace nada por enmendarlas, sin duda alguna lastimará demasiado su matrimonio al punto de poder perder su hogar.

-CUANDO ES UN HOLGAZÁN Y NO SE PREOCUPA POR PROVEER LO NECESARIO A SU FAMILIA.
(1Timoteo 5:8)

Una de las características que deja mal parado a un hombre que decidió casarse y formar hogar es, no pensar su familia y en sus necesidades, un hombre que se esperanza a vivir y a depender de los demás, que vive con los suegros o los padres y que no se preocupa por tener un trabajo estable, no lucha por traer la provisión a su casa para brindar seguridad y proveer lo básico en su casa, por su puesto que afectará la estabilidad y salud de su familia, cualquiera puede pasar una temporada mala y necesitar ayuda, pero si toda la vida ha sido un hombre irresponsable y no cumple su rol de proveedor ha quebrantado un principio fundamental en edificar su casa.

-CUANDO SU PRIORIDAD NO ES SU ESPOSA Y SUS HIJOS.
(1Timoteo 3:4-5)

Aunque el pasaje citado es para quien quiera ejercer liderazgo en la iglesia, lo que queremos destacar es la importancia de saber gobernar bien su casa, establecer correctamente las prioridades que son Dios, familia, trabajo y ministerio teniendo una esposa feliz y que se siente amada e hijos que estén creciendo bajo principios y valores que el hombre cabeza de hogar se debe encargar en sembrar y modelar, en este sentido el hombre debe aprender a gobernar y balancear su tiempo es decir ninguna familia saludable se conseguirá si esta, está en abandono, no se les dedica tiempo de calidad, tiempo de pareja y tiempo con los hijos, ni se invierte en ellos.

Estas solo son algunas de las razones principales de cómo el hombre casado y con familia puede llevar a la destrucción a su propia familia, nuestro objetivo principal como siempre es que reflexionemos.
El bienestar de una familia depende de los dos el esposo y su mujer pero bíblicamente la responsabilidad fue delegada al hombre cabeza de hogar, Dios no pedirá cuentas a esposas e hijos, Dios le pedirá cuentas al hombre cabeza de hogar, al líder de la casa de ¿Qué hizo con la familia que él le entregó?

La pregunta para todo hombre de familia es:
¿Cómo está tu familia hoy?
¿La estás construyendo o la estás destruyendo?

Luis Lovato (FAMILY FIRST)
¡QUE DIOS BENDIGA TU MATRIMONIO Y TU FAMILIA!

Esposas sujetas bíblicamente

Cuando la Biblia le dice a la mujer que se "sujete a su marido como la Iglesia a Cristo", no le está diciendo que se someta:
1. Al abuso
2. A la infidelidad
3. Al pecado
Primero, Cristo no haría eso con su amada. Por lo contrario, como se le demanda al marido, Cristo sacrificó su vida por el bien de su amada. En segundo lugar: la sujeción que la esposa le debe al marido, está condicionada por su sujeción a DIOS primero. Y en tercer lugar: la demanda se le da a parejas cristianas. Esto significa, que el esposo debe someterse igualmente a su propia cabeza, Cristo (1 Corintios 11:3). Y pregunta: ¿Qué hombre, que realmente esté sujeto a Cristo, abusaría, le fuera infiel o le pediría una indebida demanda a su esposa?
Mujer: en Cristo eres libre, ya no más esclava del hombre. Honra, respeta y sujétate a tu marido como es debido de toda mujer cristiana. Pero ni por un segundo pienses que eso significa tolerar el mal y volverte esclava del hombre.
— "Comprados fuisteis por precio; no os hagáis esclavos de los hombres" (1 Corintios 7:23).

(Cristiano Conservador)
Créditos