google-site-verification: google8ac7ecf16b727b08.html Ministerio Adorando en Su Presencia : Pastorear

Donaciones al ministerio

https://www.paypal.com/donate/?hosted_button_id=GQ9G2YA4CZZRW

Anderson Posada Ministerio Adorando en Su Presencia

Donate

Mostrando entradas con la etiqueta Pastorear. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Pastorear. Mostrar todas las entradas

Versículos sobre pastorear

Pastores, obispos ….

Juan 21:17
Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.

Hechos 20:28
Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre.

Jeremías 3:15
y os daré pastores según mi corazón, que os apacienten con ciencia y con inteligencia.

Hebreos 13:7
Acordaos de vuestros pastores, que os hablaron la palabra de Dios; considerad cuál haya sido el resultado de su conducta, e imitad su fe.

Efesios 4:11
Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros,

Proverbios 27:23
Sé diligente en conocer el estado de tus ovejas, Y mira con cuidado por tus rebaños

1 Pedro 5:2-4
Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto;
no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey.
Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, vosotros recibiréis la corona incorruptible de gloria.

Marcos 6:34
Y salió Jesús y vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, porque eran como ovejas que no tenían pastor; y comenzó a enseñarles muchas cosas.

Ezequiel 34:2-4
Hijo de hombre, profetiza contra los pastores de Israel; profetiza, y di a los pastores: Así ha dicho Jehová el Señor: ¡Ay de los pastores de Israel, que se apacientan a sí mismos! ¿No apacientan los pastores a los rebaños?
Por tanto, así les dice Jehová el Señor: He aquí yo, yo juzgaré entre la oveja engordada y la oveja flaca,
por cuanto empujasteis con el costado y con el hombro, y acorneasteis con vuestros cuernos a todas las débiles, hasta que las echasteis y las dispersasteis.
Yo salvaré a mis ovejas, y nunca más serán para rapiña; y juzgaré entre oveja y oveja.
Y levantaré sobre ellas a un pastor, y él las apacentará; a mi siervo David, él las apacentará, y él les será por pastor.
Yo Jehová les seré por Dios, y mi siervo David príncipe en medio de ellos. Yo Jehová he hablado.
Y estableceré con ellos pacto de paz, y quitaré de la tierra las fieras; y habitarán en el desierto con seguridad, y dormirán en los bosques.
Y daré bendición a ellas y a los alrededores de mi collado, y haré descender la lluvia en su tiempo; lluvias de bendición serán.
Y el árbol del campo dará su fruto, y la tierra dará su fruto, y estarán sobre su tierra con seguridad; y sabrán que yo soy Jehová, cuando rompa las coyundas de su yugo, y los libre de mano de los que se sirven de ellos.
No serán más por despojo de las naciones, ni las fieras de la tierra las devorarán; sino que habitarán con seguridad, y no habrá quien las espante.
Y levantaré para ellos una planta de renombre, y no serán ya más consumidos de hambre en la tierra, ni ya más serán avergonzados por las naciones.
Coméis la grosura, y os vestís de la lana; la engordada degolláis, mas no apacentáis a las ovejas.
Y sabrán que yo Jehová su Dios estoy con ellos, y ellos son mi pueblo, la casa de Israel, dice Jehová el Señor.
Y vosotras, ovejas mías, ovejas de mi pasto, hombres sois, y yo vuestro Dios, dice Jehová el Señor.
No fortalecisteis las débiles, ni curasteis la enferma; no vendasteis la perniquebrada, no volvisteis al redil la descarriada, ni buscasteis la perdida, sino que os habéis enseñoreado de ellas con dureza y con violencia.

Mi experiencia como pastor.

"Si pudiera decir en pocas palabras cuál ha sido mi experiencia como pastor, creo que lo podría resumir así: muchos de los mejores y peores momentos de mi vida los he experimentado desde que el Señor me llamó a pastorear.

Mejores, porque he podido ver la mano del Señor desde la primera fila. He podido ver el poder del evangelio transformando al “peor” de los pecadores. He podido experimentar el amor de Dios por medio de una congregación que me ama. He tenido la bendición de ver a mi familia encontrando gozo al servir al Señor.

Pero hay otras veces —muchas veces, más de las que quisiera recordar— donde he experimentado la desilusión de ver alejarse del Señor a gente que tanto he amado. He visto en primera fila el engaño de Satanás operando en familias enteras. He sido acusado, juzgado y rechazado por convicciones bíblicas.

El llamado pastoral es sumamente hermoso, pero a la vez sumamente difícil.

¿Valdrá la pena todo lo que hago? ¿Por qué el Señor me ha llamado a esto? ¿No habrá algo “mejor” que hacer? Estas preguntas siempre aparecen en esos momentos de dificultad, dolor, y lucha. Si somos honestos, todo pastor se pregunta estas cosas en diversos momentos.

Pero como es de esperarse, el Espíritu Santo una y otra vez susurra a nuestros corazones la importancia y necesidad de nuestro llamado. Asi que amados hermanos el hombre nos va a decepcionar, asi lo dice su Palabra, pero El Señor nunca, nunca nos decepcionará ni nos desampara. Adelante con esta gran obra de DEL SEÑOR. BENDICIONES EN ESTE HERMOSO DIA. QUE LA PAZ DEL SEÑOR REINE EN NUESTROS CORAZONES. CRISTO VIENE"

S. T.