Es muy interesante observar como hasta hace menos de una semana, muchos cristianos salían a través de sus redes sociales con palos, rejos y piedras para cuestionar la conversión del cantante de reggaetón Farruco, acto este que se repite, contra muchos otros creyentes en múltiples congregaciones, a través del mundo, vil acto este, bajo el repetido y ya inaguantable uso de la "libertad de expresión"... libertad esta, realmente válida, pero que ahora entre muchos "creyentes" se usa, solo cuando se trata de maltratar y cuestionar el testimonio de otros creyentes que están buscando genuinamente la misericordia de Dios y obedecerlo.
Mientras tanto, hace tres días, fue aprobada por la Corte Constitucional, la ley del aborto en Colombia, además de otras leyes que se están estableciendo a lo largo de Latino-américa, leyes estas, que están abiertamente en contra del diseño original de Dios.
¡ARREPIENTANSE "EVANGELICOS"!
¿Donde están sus palos, rejos y piedras?
¿Por qué motivo no está haciendo uso de su "libre expresión" en sus redes sociales para cuestionar aquellas leyes que van en contra del diseño de Dios, al cual ustedes dicen servir?
Es muy interesante y desafiante, ver cómo las piedras son las que hablan hoy: médicos, empresarios, e influencers, los cuales muchos de ellos se reconocen ateos, y son ellos, quienes, públicamente, están en defensa de la vida.
El libro 1 de Tesalonicenses nos explica que no nos dejemos engañar, porque el misterio de la iniquidad ya está en acción, sólo que en este momento hay quien lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio y que mientras no se manifieste el hombre de pecado, es decir, el hijo de perdición, el cual se opone y se enfrenta a todo lo que se llama Dios o es objeto de culto debemos ser creyentes activos en en este mundo, ya que es el Poder del Espíritu Santo de Dios el que aún retiene el poder de influencia maligna sobre los hombres, y esta resistencia, la desarrolla el Espíritu Santo a través de la iglesia. (1 Tesalonicenses 2:3-12)
Por su fruto los conoceréis, anuncia Jesús en el libro de Mateo 7:16 y 20, y el apóstol Pablo en la carta a los Romanos 9:6 nos aclara que no todo el que desciende de Israel es israelita. Quiero decir con esto, que nuestras congregaciones se han llenado de evangélicos antievangelio, es decir, cizaña que parece trigo, pero que obvio no da fruto, y estorba a quién sí trata de darlo.
El llamado a la iglesia, a la real iglesia, a la que sí es evangélica y entiende el evangelio, es a seguir firme en las convicciones que tenemos en cuanto el propósito, diseño y guía de Dios para nuestras vidas.
Es cierto que la maldad de muchos aumentará en estos tiempos, pero también sabemos que mientras la iglesia de Cristo esté presente en esta tierra, no puede detenerse su obra, ni dejar su luz debajo de la mesa.
Es alarmante, y más que alarmante, es muy triste el silencio sepulcral y asesino de muchos líderes cristianos de diferentes congregaciones, que ante el asesinato silencioso de muchos bebés en el vientre de sus propias madres, callan por temor al hombre, evidenciando así, el poco o nulo temor a Dios, al cual dicen predicar. Ser proaborto, no implica decirlo a voces, con sus propio silencio, están validando tan terrible maldad.
Si realmente tu como creyente amas a Dios, entonces también amas la vida.
Habla en lugar de los que no pueden hablar, defiende al inocente que no puede valerse por sí mismo Proverbios 31:8
Y también leemos,
Dios, tus ojos vieron mi cuerpo en gestación:
todo estaba ya escrito en tu libro;
todos mis días se estaban diseñando,
13 Tú creaste mis entrañas;todos mis días se estaban diseñando,
aunque no existía uno solo de ellos.
me formaste en el vientre de mi madre.
14 ¡Te alabo porque soy una creación admirable!
¡Tus obras son maravillosas,
y esto lo sé muy bien!
15 Mis huesos no te fueron desconocidos
cuando en lo más recóndito era yo formado,
cuando en lo más profundo de la tierra
era yo entretejido.
16
Salmo 139:13-16
Iglesia no calles ante la injusticia que aborrece el Dios al que dices servir,
La palabra "Aborto" es solo un Eufemismo de la palabra "Asesinato", pero ambas palabras evidencian el mismo acto atroz.
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