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Espejos Rotos(Las malas decisiónes) Parte 5


Decisiones, el bien y el mal
Libre Albendrio
Toma de Decisiones





Adán y Eva fueron formados y recibieron soplo de vida, lo que les dió un origen y una identidad, además fueron puestos en Edén para que lo labrase, lo guardasen y enseñorearan sobre todos los animales y plantas que allí había, osea Dios les dió un propósito y una autoridad.
También se les dijo que podrían comer de todo árbol del huerto a excepción del árbol de la ciencia del bien y el mal , osea que Dios les dio provisión.
Dice la biblia que Dios se paseaba por Edén, lo que significa que también tenían compañía estando en la misma presencia de Dios, a parte de la comunión que Adán y Eva tenían como pareja.
Y por último pero no menos importante recibieron lo que hoy conocemos y aún tenemos a nuestro alcance todos los seres humanos creyentes o no creyentes: Libre Albendrio.


Adán y Eva tenían muchisimas más posibilidades de hacer lo correcto  y
solo una opción de tomar una mala decisión:
Comer el fruto prohibido...
El libre albedrío es "la potestad que el ser humano tiene de obrar según considere y elija. Esto significa que las personas tienen naturalmente libertad para tomar sus propias decisiones, por lo cual solo él es responsable de asumir las buenas o malas consecuencias de su uso", lo que demanda en el ser humano un nivel importante de conciencia y de responsabilidad a la hora de elegir.

De todos lo árboles "deliciosos a la vista "que habían en Edén se podía comer de su fruto, y eso incluía el maravilloso árbol de la vida, del cual podrían disponer y al momento de comerlo vivirían para siempre.
De tantos árboles entre los que ellos tenían la posibilidad de elegir solo había uno del cual no deberían comer y este era el árbol de la ciencia del bien y el mal, lo que quiere decir que cada uno de los árboles que había en Edén era la representación de una decisión entre muchas buenas y acertadas decisiones, lo que estadísticamente hablando, nos alumbra que Adán y Eva tenían muchisimas más posibilidades de hacer lo correcto  y solo una opción de tomar una decisión incorrecta, una mala decisión: Comer el fruto prohibido...



El resto de la historia ya lo conocemos, y aunque es así, aún seguimos tomando decisiones desacertadas que de antemano sabemos las consecuencias negativas que ello puede llegar  a traernos. Recordemos también que toda decisión trae consigo de manera implicita una renuncia, lo que significaba en este caso que cuando Adán y Eva decidieron desobedecer, de manera implicita también estaban renunciando a los beneficios que traía la obediencia. Obviamente Adán y Eva no buscaban perder las bendiciones de Edén por decisión propia, de hecho nadie en sus cabales renunciaría a los beneficios brindados. Solo tomaron una mala decisión que generó las consecuencias que hasta nuestros días nos alcanzan.

A parte de la separación espiritual que ello produjo, las consecuencias físicas y la imposibilidad de permanecer y disfrutar de las bendiciones otorgadas  en jardín de Edén , otra de las muy lamentables consecuencias que trajo la mala decisión de Adán y Eva fue que tuvieron miedo, miedo de Aquel que desde el principio lo que hizo fue darles vida, y con ella bendición tras bendición.

Es verdad que aunque la serpiente antigua llamada diablo hizo un gran esfuerzo en influir en la decisión de Adán y Eva mintiendo al distorsionar lo que Dios les había instruido, finalmente quienes son responsables son ellos mismos porque son ellos quienes asumen las consecuencias de sus buenas decisiones o las consecuencias de sus malas decisiones.

El bien y el mal
Las decisiones que hoy tomes, no solo afectarán tu presente,
sino que también estarán en tu futuro
Todo esto te lo digo porque hasta el día de hoy muchas veces queremos culpar y responsabilizar a otros por las consecuencias de nuestras malas decisiones, entonces tomamos decisiones incorrectas y al ver las consecuencias, queremos evadirlas y responsabilizar a otros si es necesario así como lo hizo Adán al culpar a Eva y Eva al culpar a la serpiente Antigua.

Ya no te quedes en las consecuencias de tus malas decisiones, reconoce que te equivocaste, pide perdón si es necesario y decide reorientar tu vida en la consecuencia de las buenas decisiones.


Las decisiones que hoy tomes, no solo afectarán tu presente, sino que también estarán en tu futuro, y esto influirá también sobre aquellos que amas...Así que tomemos las mejores decisiones hoy para que mañana lleguen buenas consecuencias por ello, llamadas también bendiciones.

Dios te guarde, te bendiga y te dé la sabiduría necesaria para cada decisión que tomes a partir de este momento. 

Te invitamos a compartir estas reflexiones y consejos con tus familiares y amigos. Recuerda que Cristo te Ama.





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